Grandes novelas escritas con prisa

Aunque hoy en día nos sobran libros y relatos para pasar el tiempo, lo cierto es que escribir una novela en condiciones nunca es fácil. Hace falta una buena historia, unos personajes con encanto, una trama que enganche, un final que sorprenda… y sobre todo y para todo, hace falta mucho tiempo. Al menos, en la mayoría de los casos. Contra todo pronóstico, algunos de los libros más conocidos han sido sorprendentemente escritos en menos de un mes. Se conoce que los autores se encontraban en el culmen de su inspiración y no querían desperdiciar ni un segundo para dejar fluir las ideas. En la mayoría de los casos, las prisas valieron la pena.

El niño del pijama de rayas es un buen ejemplo. Esta novela de John Boyne fue todo un éxito y dio lugar a una emotiva adaptación cinematográfica. Todo ello teniendo en cuenta que no es que el libro fuera escrito en menos de un mes ¡Es que se escribió en solo dos días!

Ya hemos mencionado El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde, que es, a día de hoy, uno de los clásicos del terror más recomendables. Pues bien, esta joya de la literatura fue concebida por su autor Robert Louis Stevenson en menos de una semana.

Probablemente todos habréis visto o como mínimo conoceréis la película La naranja mecánica, pero ¿Cuántos sabíais que la novela en que se basa fue escrita en solo tres semanas? Lo más curioso es que su autor, Anthony Burgess lo hizo sin mucho interés y por motivos principalmente económicos.

Y la lista sigue. Muchas otras novelas se han escrito en cuestión de semanas o días, como La carretera (Jack Kerouac), Estudio en Escarlata (Arthur Conan Doyle), El fugitivo (Stephen King) y El caballero de la Maison Rouge (Dumas).

Visto lo visto, si todavía no te has puesto a escribir la novela que te llevará a la cumbre porque te daba pereza, quizá deberías pensártelo dos veces.

Fuente: Curistoria